-Bueno, Onda, nos vamos ya... Y otra vez gracias, ¿eh? Si no fuera por ti...
-Nada, nada, para algo están los vecinos...
-Si no estuviera enferma no te habríamos avisado, ya lo sabes. Pero es que está en una edad tan difícil... No nos gusta la idea de dejarla sola.
-Ya verás que es un angelito...
-Claro, claro... Seguro. Con unos padres tan responsables como vosotros...
-En la nevera tienes apuntado nuestro móvil...
-Eso ya se lo has dicho antes, cariño...
-...el del médico...
-Claro, claro...
-...el teléfono de emergencias...
-Eso ya se lo has dicho antes, cariño...
-...el de la policía...
-Claro, claro...
-...los bomberos...
-Que ya lo sabe, cari...
-...protección civil...
-¿A qué hora decíais que empezaba el cine? ¡Uy, pero qué tarde eeeeees! Si no os ponéis las pilas yo creo que no llegáis...
-...aduanas...
-Anda, venga, que os acompaño a la puerta. Adiós y a pasarlo bien, seguro que os reís un montón con la peli...
-Oye, que es un documental muy dramático sobre la castración de las Ardillas Hermafroditas en el Logroño Meridional...
-Sí, ya veo, dramatiquísimo... Hala, hala, táluego...
-¡Ay, casi se me olvida! Te hemos dejado algo de comida en la nevera...
-Pero si no era necesario...
-...hamburguesas de tofú...
-¿Hamburguesas de...?
-...y salchichas de guacamole biológico...
-Vaya, gracias, en serio, esto... Qué maravilla...
-Y en la alacena tienes vino.
-Sin alcohol ni uva, supongo.
-¿Cómo lo sabes?
-Intuitivo que es uno...
-Venga, cari, vámonos...
-Hasta luego...
Puerta que se abre. Puerta que se cierra. Estómago que gruñe.
-...joder, espero que haya algún TelePizza por aquí cerca. ¿Dónde tendrán estos las páginas amarillas de papel reciclado? A ver a ver...
-Hola, tigre. Wooooooaaaaaaauuuuurrrrr...
-Holaquétal... Tú debes ser Jessica, ¿no?
-Para ti soy Jessi, amore...
-Esto... Oye, ¿no vas un poco...? Bueno... ¿Ligerita de ropa? Creía que estabas... ya sabes... resfriada o algo así...
-Uy, si te has puesto rojo y todo...
-¿Eso...? ¿Eso es un liguero?
-¿Quieres quitármelo?
-No, no, qué va, qué va, era curiosidad... Es que nunca había visto ninguno tan de cerca. Anda, toma mi chaqueta que vas a coger frío...
-Caliéntame tú, tigre...
-Jajajajajajaja... Buena broma, sí, para tener catorce años tienes... ejem... mucho sentido del... del humor, sí...
-En once meses hago quince, guapo. ¿Quieres que te enseñe el piercing?
-¿El piercing? ¿Tienes un pier...?
-Sí, mira, en el clíto...
-¡¿Pero quieres hacer el favor de taparte?! Como entre ahora tu madre me envía a los Mossos en operación de limpieza...
-¿Quieres correrte en mi cara?
-¿No prefieres que te lea un cuento?
-Un cuento, ¿eh? ¿Y qué cuento me leerías tú, tigre? Wooooooooaaaaaaaauuuuuur...
-No... No sé... El que tú quieras... ¿Blancanieves y los siete enanitos?
-Aaaa-jááááá... Ya veo por dónde vas... Quieres que me tire en el suelo y que los siete enanitos, uno detrás de otro, me den por...
-¡MadredeDiosvirgensanta! ¿Pero tú no estudiabas en un internado suizo? ¿Quién te da clases? ¿La Srta. Putenmeyer?
-Oye, que yo también tengo mis necesidades...
-Claro, no lo dudo, pero cuando me metan en la cárcel serán otros los que sacien sus necesidades en mí, ¿comprendes? Y lo de estar de rodillas me sienta fatal, me salen unos moratones horribles...
-Si quieres te meto un pepino por...
-¡Anda, vuélvete a la cama ahora mismo o me enfado!
-Sí, sí, vamos a mi cama y enfádate... Quiero que me pegues.
-¿Que quieres que te qué?
-Que me pegues. Pam-Pam.
-¿Pero porqué iba yo a querer pegarte?
-Porque he sido maaaaaalaaaaaaaaa...
-Haz el favor de quitar tu lengua de mi trompa de eustaquio ahora mismo o...
-¿O qué? Ven aquí, ponla entre mis te...
-¡Aichaichaichaich! ¡Aich! ¡Suelta, lapa, suelta! No, si ya sabía yo que tanto tofú no podía ser bueno para las hormonas...
-A mí comer carne no me da arcadas, mmmmmmmmhhhhhh, meeeee encaaaaaantaaaaa...
-Voy a llamar ahora mismo al veterinario, creo que estás en celo... Mierda, es el único teléfono que tus padres no han apuntado en la nevera...
-¿Veterinario, eh? Me gusta eso, poséeme como a una perra...
-¿Pero tú crees que ese es vocabulario para una jovencita culta como tú?
-Si quieres me visto como una colegiala... Para que me des así en el culete, pam-pam...
-Y dale con el pam-pam, tú tienes algún tipo de trauma, ¿no?
-¿Sabes que nuestras habitaciones están pared con pared? A esa tal Sondra Sombra no le ponías tantos reparos ayer por la noche... Créeme, se escucha todo-todo-todo...
-No, por favor, no menciones a... Y no digas su nombre, que nunca se sabe cuándo puede aparecer... Deja que baje las luces por si acaso... Y entre Sombra y yo no ha pasado absolutamente nada. Na-Da. Bueno, casi me mata con un mojito de ortigas, pero aparte de eso...
-Eso, tigre, baja las luces y haz que suba al séptimo cielo con tus embestidas de macho cabrío...
-Definitivamente, tú no te has criado viendo "La Abeja Maya", ¿eh?
-Enséñame tu aguijón. Libera a Willy. Déjame probar tu polen...
-¿Perdón?
-Tu polen. Tu savia. Tu crema de leche. Mira, mira, soy muy elástica... ¡Op! ¡Op! ¡Op!
-¡¿Pero qué haces, insensata?!
-Se llama "La Rueda". Es una técnica amatoria china.
-¿Y no te mareas?
-Sólo si lo hago sola...
-Pues toma, pastillas para el mareo. Me largo.
-¿Cómo que te largas? ¿No irás a dejarme así?
-Si fuera por mí, te metía en la nevera y ahí te quedabas hasta que los ángeles pagaran por estacionar en zona azul, yo me largo al falafel de la esquina a zamparme un buen dürum...
Puerta que se abre. Puerta que se cierra.
-¿Se ha ido ya? -pregunta la Sombra, saliendo de debajo de la mesa, donde estaba escondida.
-Creo que sí... -responde Jessi-. No te quejarás, ¿eh? Te lo he puesto a huevo. Con el calentón que lleva, si esta noche no consigues empotrarlo contra la pared es porque es de piedra...
-Eres un angelito, Jessi, cariño... Toma, el McMenú que te prometí...
-Dios, esto sí que despierta mi lascivia... Maldito tofú, si es que así no hay quien viva... Wooooaaaaaaauuuuuurrrrrr... ¿Has traído también Coca-Cola?
-Claro. De litro y medio.
-Meeeeeeeeeeeoooooooooooowwwww...
-Bueno, yo me largo antes de que se me enfríe el cabroncete este...
-Que te aproveche, ¿eh?
-Igualmente, cariño.
He cambiado mi opinión. Ahora soy admiradora de Jessi.
ResponderEliminarCreo que lo intuyes, pero me ha encantado! Últimamente todo me encanta.. Incluso yo soy encantadora! Y tú Corde, y Jessy y todos! Creo que tanto sol me ha afectado al cerebro. Pero me encanta!
ResponderEliminar¿A ti también Jessi te ha puesto como una moto, Hell?
ResponderEliminarPor favor, contened vuestros calenturientos desvaríos y moderad vuestro lenguaje, que este blog lo leen niños, me cago en la puta.
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